Cuba y su revolución tiene una de las condiciones que acompañan a los grandes acontecimientos de la historia, la de dividir aguas, esto sucedió casi desde su fase inaugural y en su desarrollo en distintos clivajes ,que podríamos señalar : la invasión a Bahía de los Cochinos, la crisis de los misiles, la muerte del Che en Bolivia, los intentos de asesinatos a sus principales líderes en primer lugar a Fidel, sus estructurales problemas económicos, la caída de la URSS y el inicio de lo que se conoció como periodo especial, las sucesivas provocaciones norteamericanas que tienen en el bloque a la isla una constante y concreta política de guerra.
Cuba divide aguas porque nadie puede hacerse el neutral o el distraído ante su ejemplo; los que la amamos somos sabedores que las deudas espirituales (la política entendida en su dimensión ética de estar siempre del lado de los pobres lo es) no se extinguen jamás y ninguno de los pagos que hagamos nos puede eximir de repetirlos en cada momento oportuno.
Y si hablamos de Cuba revolucionaria oportuno es siempre, no solo para afirmar que en muchos sentidos ya venció, haber declarado una revolución socialista en las narices de la potencia capitalista más importante del mundo en condiciones absolutamente adversas, y seguir de pié es una gran victoria.
Demostrarle al mundo que sobre su pequeña superficie de de 110.000km cuadrados le a dado de comer a sus más de 10 millones de habitantes ( la provincia de Salta tiene 150.000 km cuadrados de superficie, un millón doscientos mil habitantes aproximadamente y un 60% de su población vive en la pobreza),que con sus recursos materiales limitados ha alcanzado estándares en salud, educación, en algunos desarrollos científicos, y en deportes superiores a las principales potencias capitalistas del mundo. Esto también es una gran victoria.
Hoy las críticas contra la revolución se hacen en nombre de la “democracia “ y en nombre también de la “defensa de los derechos humanos”, este alzamiento de lapiceras mojadas en ya sabemos que tintas, no dicen ni un renglón sobre la cárcel de guantánamo que tiene más de 180 presos incluido niños,(Obama prometió cerrar pero ahora no dice ni una sola palabra)que tiene armas nucleares y que viola la soberanía de un país independiente y que es paradójicamente lo único que justifica que se afirme que en el territorio cubano se violan los derechos humanos.
Los “demócratas” de las potencias occidentales, saludan a las democracias enanas, como la colombiana en donde se realizan elecciones con ausentismo del 60% en un país no soberano con 7 bases militares norteamericanas, ¿quién pensaban que iba a ganar sino Juan Manuel Santos?. Son los mismos que cuando alzan su voz sobre el oriente medio es solo para justificar al estado criminal de Israel que comete una verdadera masacre contra el pueblo palestino, o para legitimar masacres como la de Falluya cometida por los yanquis.
Los que estamos con Cuba y con Fidel sabemos que ellos en tiempos de victorias pero fundamentalmente en tiempo de reveses, se han cargado sobre sus hombros el decoro de los revolucionarios y de los luchadores por la igualdad en el mundo; y esto también la hace victoriosa.
Los que defendemos a Cuba con pasión y convicción no desconocemos las dificultades por la que atraviesa y los peligros que la acechan por el contexto mundial adverso, y por los problemas que devienen del desarrollo de su propio proceso que confiamos sabrán resolver, pero es pertinente afirmar aquí conceptualmente “que el gusano antes de transformarse en mariposa es crisálida” y al proceso revolucionarlo cubano, se le podrá reclamar condiciones de una sociedad de productores libres, cuando los revolucionarios del mundo hagamos la parte que nos corresponde y tumbemos al capitalismo a escala global y esa es una tarea propia que no se la podemos aquilatar a los cubanos.
Por último, hay quienes afirman que la historia solo sabe perdonar a los que triunfan y es inclemente con los vencidos; está claro que la revolución cubana no ha venido al mundo a pedir perdón, sino para rebelarse contra la injusticia capitalista y es una luz del tamaño del sol que será observada con gratitud en la historia de una futura humanidad libre. Y aquí aunque parezca redundante también está venciendo.
12-7-2010
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